El equipo jurídico interno de Emirates NBD trabajaba con varias herramientas, algunas de ellas de creación propia, y colaboraba con distintas partes a través del correo electrónico. Se enfrentaban al reto de la visibilidad y el control de todas las actividades jurídicas del grupo dentro del equipo.

Emirates NBD había acumulado años de datos jurídicos en sus correos electrónicos y en las herramientas aisladas. Los documentos jurídicos se guardaban por separado en la unidad de disco del servidor. Se dieron cuenta de que estaban perdiendo tiempo, energía y dinero realizando tareas administrativas innecesarias e intentando seguir el ritmo de su carga de trabajo utilizando un sistema engorroso y específico.

El equipo jurídico de la sede central es responsable de gestionar los litigios y los asuntos corporativos, mientras que las sucursales y otros departamentos solían plantear una solicitud a través del sitio web para que el departamento jurídico la gestionara en consecuencia, esto exige que el equipo jurídico busque una solución flexible que les facilite el seguimiento de los asuntos jurídicos planteados por las distintas sucursales y departamentos.

También se enfrentaban al reto de obtener visibilidad en tiempo real de los riesgos y gastos que conllevaba cada asunto jurídico, gestionar los datos de los clientes, almacenar documentos, agilizar múltiples asuntos dispersos por toda la geografía y crear un flujo de trabajo sin fisuras entre las distintas funciones empresariales, incluidas las jurídicas y financieras.